¿Qué es una prótesis?
Una prótesis dental es un elemento artificial que sirve para restaurar la anatomía de uno o varios dientes consiguiendo que el paciente recupere la funcionalidad y estética de su dentición.
El secreto del éxito de un tratamiento de prótesis dental está en la indicación, que viene dada por un correcto diagnóstico y posterior mantenimiento realizado por el dentista, en función de cómo esté el estado de salud de los dientes, encías y resto de estructuras de la boca, y los condicionantes de salud general.
En la elaboración de una prótesis interviene un colaborador de máxima importancia en la realización del tratamiento: el técnico en prótesis dental. El técnico fabrica la prótesis pero bajo las indicaciones del facultativo, que es quien tiene la capacidad de decidir si la prótesis fabricada cumple las características necesarias para ser colocada en su boca, y no dañarla durante la colocación ni durante su utilización.

¿Qué tipo de prótesis existen?
1. Prótesis dental fija

Son aquéllas que, una vez colocadas por el dentista, no pueden ser retiradas por el paciente, es decir, deberán ser extraídas por el odontólogo en el caso de que quieran ser desalojadas. Dentro de las prótesis dentales fijas, se encuentra la siguiente clasificación:
- Coronas o puentes fijos dentosoportados. Estas prótesis sirven para restaurar uno o varios dientes. Se colocan sobre los dientes previamente tallados, siendo ellos su único apoyo. se fabrican tomando impresiones del resto de los dientes. Actualmente, se pueden tomar impresiones digitales obtenidas con un escáner intraoral. En nuestra clínica utilizamos el escáner Itero Elements 2 para obtener los registros de la boda del paciente.
- Prótesis fija sobre implantes. Las prótesis implanto-soportadas constan de una estructura protésica atornillada o cementada en los implantes que se han colocado previamente dentro de los huesos maxilares.
Los materiales usados para la fabricación de las prótesis pueden ser muy diversos. Tradicionalmente se han usado las prótesis de metal-cerámica pero hoy en día se tiende a utilizar el Zirconio que ofrece diversas ventajas como una mayor biocompatibilidad, resistencia y estética. Los dientes, una vez restaurados, pueden seguir enfermando, por ello se deben cuidar igual o más que antes. La zona más delicada es la zona de unión entre la restauración y el diente. Periódicamente el dentista lo debe chequear con exploraciones clínicas y radiológicas.
2. Prótesis dental removible
Las prótesis dentales removibles son aquellas que pueden ser extraídas por el propio paciente. Son la opción más elegida por las personas con imposibilidad de someterse a la colocación de implantes dentales, ya que no cuentan con las condiciones apropiadas para ello. Cuando faltan todos los dientes se opta por la prótesis completas removibles.
Estas prótesis abarcan toda la cresta ósea, es decir, el uso donde previamente se encontraban los dientes naturales. También son conocidos como «mucosoportadas», ya que aseguran su sujeción gracias a la encía y a la propia composición de la prótesis. Si el paciente dispone de un área oral desdentada, pero aún conserva algunos dientes de la arcada, se puede recurrir a la colocación de una prótesis parcial removible de meta y resina, también conocidas como «esqueléticos». Se sujetan en la boca a través de la encía y de los dientes adyacentes mediante unos ganchos metálicos.

¿Cómo surge la necesidad de una prótesis dental?
- Necesidad estética o funcional de recuperar la sonrisa.
- Traumatismos o fracturas severas.
- Pérdida dental por enfermedad periodontal o caries.
- Diente que se han debilitado porque necesitan recubrimiento completo.
- Reabsorción ósea que hace más complicadas otras soluciones (como un implante).
¿Cómo es el procedimiento?
- Diagnóstico y valoración personalizado. Se realiza una evaluación radiográfica y clínica para valorar qué opción es la más correcta según las necesidades que tiene el paciente.
- Toma de registros e impresiones. Se moldean una a una cada estructura bucal para poder diseñar una prótesis correctamente ajustada.
- Ajuste y prueba. Se realizan pruebas funcionales y estéticas para poder asegurar la estabilidad y comodidad.
- Colocación final. La prótesis se entrega y adapta al paciente, con las instrucciones de cuidado y uso.
- Mantenimiento y revisiones. Es muy importante realizar revisiones periódicas para poder asegurar la adaptación y durabilidad.
FAQ- Preguntas frecuentes
Las removibles se pueden quitar para su higiene, mientras que las fijas se atornillas o cementan y no se pueden quitar. La elección de una u otra prótesis dependerá del presupuesto y caso clínico del paciente.
Claro que sí. Hoy en día, se utilizan materiales como al resina de alta estética, porcelana o el zirconio que permiten conseguir unos resultados naturales que imitan el color, forma y textura de los dientes originales.
Siempre que tengamos un buen mantenimiento e higiene, una prótesis normalmente puede durar entre 5 y 15 años. El hecho de tener revisiones periódicas nos ayudarán a detectar ajustes necesarios.
No. Este proceso es totalmente indoloro porque se realiza con anestesia local siempre que sea necesario. En el caso de las prótesis removibles, no necesitan de cirugía.
Sí, pero al principio se necesita un pequeño período de adaptación. La mayoría de pacientes, con el tiempo, recuperan la función masticatoria normal.
Depende del tipo de prótesis. Las removibles se deben de limpiar a diario utilizando productos específicos. Para las fijas sería igual o incluso más higiene.
Sí. Esto es así porque al ocupar el espacio de dientes que hemos perdido, se evitan desplazamientos dentales y problemas con la mordida.
Sí. Hay prótesis removibles y puentes fijos que se pueden colocar apoyándose en los dientes naturales restantes.
Existen opciones sobre dentaduras removibles que se sujetan sobre implantes pero el paciente podría retirarlas y opciones fijas, que no se podrían quitar.